Para evitar dichos errores ofrecemos las pautas o el papel que debemos adoptar los adultos en estas situaciones:
- Brindarles diversidad de roles. Esto le va a permitir encontrar el modelo que mejor se ajuste a su personalidad, y a la vez hará que tenga una mentalidad más abierta para entender a los demás.
- Ofrecerles distintos tipos de juguetes. Al ofrecerles juguetes sin hacer distinción guiada por los estereotipos, aprenderán que pueden realizar distintos roles independientemente de su identidad de género.
- Respetar sus elecciones. Sentirán que son valiosos por sí mismos, no por sus decisiones.
- Ayudarles a reflexionar con preguntas de curiosidad. Cuando nos encontremos en situaciones en las que les queramos mostrar otras opciones, es una buena idea hacerlo desde la reflexión en vez desde el sermón. Al niño que dice “yo voy a conducir como papá, porque soy un chico”, podemos preguntarle “¡Anda! ¿Las mujeres no conducen? ¿Has visto alguna mujer conducir?”. Seguro que nos sorprenden con sus respuestas.
- Ofrecerles amor incondicional. Sobre todas las cosas, ofrecerles amor incondicional. En ocasiones los adultos tememos que los niños puedan ser socialmente rechazados por no ajustarse a los moldes tradicionales, y buscando protegerlos en realidad les presionamos para que no se salgan de la norma. Tengámoslo muy presente e independientemente de sus cualidades, habilidades y capacidades, hagamos que se sientan queridos y respetados en casa. Sobre estos cimientos, serán capaces de enfrentar cualquier cosa que les ocurra.
Hola somos dos compis de clase Laura García Y Marta Cruz y nos ha parecido bastante interesante este post de como seguir diferentes pautas para no cometer diferentes errores a la hora de que los peques vayan a jugar o elegir un juego.
ResponderEliminarUn saludo.
Hola chicas somos las alumnas que hemos creado el blog de vida saludable en EI. Pensamos que este post es importante ya que los adultos a veces cometen fallos en la hora del juego, y no nos damos cuenta de la relevancia que tiene el juego en edades tempranas. Es un artículo que merece la pena leer.
ResponderEliminarUn saludo.